Siempre intentando ver más allá de lo evidente, el cine de la noruega Lene Berg se ha ido abriendo paso en los últimos años con su inteligencia, su sentido lúdico y su ingenio. Como si levantara atestados (anti)policiales, Berg reúne en sus películas una serie de indicios, pruebas y evidencias que terminan señalando las faltas y ambigüedades de los que están en el poder, las voces cantantes del discurso oficial raramente puestas en evidencia. La sociedad de la vigilancia, los mecanismos ocultos de la gentrificación, la construcción de la memoria histórica y las dinámicas de dominadores y dominados son algunos de sus intereses, que recorreremos a través de este conjunto de películas, muchas inéditas en nuestro país. Sus estrategias formales, que recurren muchas veces a la libre asociación y al humor, van desde suntuosas puestas en escena a un cine hecho con cámaras de vigilancia, pasando también por el uso de fotos, ilustraciones y recortes en películas que se encuentran al borde de la animación sin tocarla. En definitiva, un cine revulsivo que nos invita a pensar el mundo como nunca lo habíamos pensado antes.
Festival de Cine de Sevilla
