Grand Cru

A los 21 años, el aspirante a poeta Pascal Marchand, nacido en Montreal, llegó a la mítica tierra de Borgoña para trabajar en la vendimia. Fascinado por la región, decidió quedarse y emprendió una incierta senda hacia el estrellato en el mundo de la vitivinicultura. Ahora, treinta años más tarde, es un artista y pionero reconocido que busca su inspiración en los antiguos métodos de los monjes cistercienses, quienes, con minuciosidad, estudiaron y refinaron las técnicas borgoñonas de producción de vino en la Edad Media. La película se rodó en el año más duro para Pascal: la catastrófica temporada de 2016, marcada por devastadoras heladas, granizadas y enfermedades en los viñedos. Es una carta de amor y un relato admonitorio a la vez, pues los enólogos como él deben enfrentarse a las impredecibles y destructivas consecuencias del cambio climático. (Seminci - Valladolid International Film Festival)