Blue in the Face

Aunque Smoke no me pareció demasiado interesante, su secuela, que carece de cualquier tipo de trama consistente, fue sorprendentemente más entretenida. Funciona no solo como un retrato tipo postal de Brooklyn como una ciudad dentro de otra ciudad, sino también como un collage de conversaciones ingeniosas y agradables que suenan como una mezcla entre Smoke y Coffee and Cigarettes de Jarmusch. Las curiosas alegrías y preocupaciones de los personajes cómicos están aderezadas con humor seco... Es un placer para los que les gusta escuchar. Lo más divertido para mí fue la representación de Suecia de Lou Reed. (19.03.2009)

Smoke impressed me in its time as an immensely sympathetic essence of the processes of American independent film. However, the sequel feels more like a compilation of unused shots from the first film and improvisational performances that arose as a spontaneous idea of the creators of Smoke, who got together at an anniversary meeting. Although the first film was not strictly based on a story, here there is no story to speak of at all. It feels disjointed and even though the love for Brooklyn and New York shines through, the appearances by popular American creators and celebrities can't save it. Overall impression: 55%. (16.02.2015)