La viuda alegre

Posiblemente la mejor versión de la opereta de Franz Lehar, en la que Stroheim combinó con singular talento registros antagónicos, desde el más sórdido hasta el más brillante. Su resultado es un espectáculo fascinante, en el que bajo una apariencia tirando a frívola se ponen al descubierto las fibras más sensibles de la condición humana. (Filmin)