¡Oh boy! 24 hrs en Berlín
Director:
Jan-Ole GersterGuión:
Jan-Ole GersterCámara:
Philipp KirsamerReparto:
Tom Schilling, Friederike Kempter, Marc Hosemann, Katharina Schüttler, Justus von Dohnányi, Martin Brambach, Ulrich Noethen, Michael Gwisdek (más)Streaming (1)
Sinopsis(1)
La suerte parece haber dado del todo la espalda a Niko Fischer, soñador treintañero, antihéroe sin solución. La novia se ha cansado de sus remoloneos, el padre lo ningunea y el psicólogo acaba de declararle emocionalmente inestable. Ni siquiera puede conseguir, pese a los repetidos intentos, una mísera taza de café con la que sustituir ese alcohol que antes ahogaba sus miedos. Tal vez la esperanza de hallar, azarosamente, su sitio en el mundo lo empuja al vagabundeo por un Berlín en blanco y negro a ritmo de jazz. Jamás vivirá Niko unas veinticuatro horas tan ajetreadas, de lugar en lugar, de encuentro en encuentro, a cada cual más pintoresco. (Surtsey Films)
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Reseñas (2)
Una visión polvorienta en blanco y negro, amargamente cómica, del Berlín contemporáneo a la sombra de la infeliz historia alemana, y un joven merodeador sin futuro. Se encuentra con algunas personas (viejos y nuevos conocidos), conversa y nuevamente (y sin éxito) intenta pedir el café de sus sueños en todas partes. Algunos momentos agradables y un buen protagonista, pero en general no entretiene mucho y tampoco nos comunica algo grande. Y ese trasfondo de jazz como si fuera de Woody Allen no pega. Está bien como relleno para el cine arte a la espera del siguiente Jarmusch.
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¡Excelente! Cuando vi los premios de cine alemanes en primavera, esas dos palabras "Oh chico" me molestaban un poco, ya que esta película abarcaba casi todas las categorías y al final resultaba aburrida. Sin embargo, después de verla, no me queda más remedio que quitarme el sombrero. Merece sin duda todos los premios y reconocimientos que ha recibido. Todo es como debería ser, una película en blanco y negro agridulce impregnada de melancolía, algo que solo muy pocas ciudades pueden ofrecer en la misma medida que Berlín. Tom Schilling es excelente en el papel principal, su personaje de Nika es irresistible para todos, la música es excelente y recuerda a las películas de Woody Allen, la fotografía es original, el guion es impecable con diálogos brillantes, los personajes secundarios están muy bien interpretados y podría seguir así indefinidamente. Oh Boy es una película excepcionalmente exitosa, una declaración generacional, se podría decir que es una obra maestra con potencial de convertirse en un clásico de culto, que sin duda recordará el cine clásico de los años sesenta y setenta. El cine alemán ha estado en excelentes manos en los últimos años y no solo gracias a Akin, Tykwer o Petzold. Se está formando una generación de jóvenes y talentosos directores que sin duda nos mostrarán mucho más en el futuro.
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