El triángulo de la tristeza

«El único lugar donde funciona el socialismo es el infierno, y allí no lo necesitan.» Una oda satírica a la inevitable desigualdad en la sociedad. El equilibrio es utopía. En términos de valor de entretenimiento, esta cena de degustación de The Square, se convirtió colosalmente en un concierto absurdo en un yate de lujo que supera todo lo que hemos visto en el género de la comedia en los últimos años. Y ni siquiera es una película de género de comedia. También disfruté de los duros golpes de la cámara panorámica. Cuando tienes algo que decir, puedes permitirte el lujo de recordarte una y otra vez que la forma es sólo un medio. Al igual que todo el caprichoso glamur de los pasajeros en este gran viaje es innecesario... No le doy a la película la quinta estrella porque el último tercio de la película, la «isla», no llega a la parte del «barco», tanto en términos de humor como de eficacia para rematar las escenas. ¡Pero el final es excelente! (11.07.2022)

Ruben Östlund ofrece una excelente sátira social en una forma interminablemente entretenida y a veces crudamente divertida que parece combinar tres películas a la vez. El punto central de esta distintiva obra es, por supuesto, la literal tormenta de mierda en medio de la trama, que casi parece haber salido de una producción de los estudios Troma para luego navegar en aguas internacionales del cine de clase A. No será una película para todo el mundo, pero es sin duda el espectáculo más significativo del festival de Karlovy Vary de este año y, sin duda, uno de los mayores acontecimientos cinematográficos del año. Cuando se estrene en los cines nacionales, ¡apúntalo en tu agenda! [KVIFF 2022] (09.07.2022)

For me, on level with Parasite, and hands down the best film of this year’s KVIFF and quite likely one of the best films of the year. Sound social criticism with a stimulating, original script and wrapped in a very audience-friendly and entertaining package. Bursts of laughter assured, as well as amused disgust in the brilliantly staged captain's dinner scene, and a nicely ambiguous ending. (56th KVIFF) (10.07.2022)

Ruben Östlund delivers a wry satire about contemporary society and people who are not prepared to lose their social status. But it is not intellectual onanism, it is an extremely entertaining and witty comedy that doesn’t take anything sacred, and apart from the great cast, original ideas and clever dialogues, it offers at least one scene that will go down in film history for its absurdity and escalation. One of the best films of the year. (20.09.2022)

Östlund's sell-out with one luxurious fecal scene and a lot of populism that doesn’t offend anyone at all. In this respect, the Swedish merchant of cheap satire is the best in the world. As a filmmaker, however, he is obviously past his prime. Press play and summon Force Majeure. (02.01.2023)