POMO

¿Ken Loach puede contar la historia de la «gente corriente» y sus problemas con tanta autenticidad y sinceridad? ¿Y así de maravillosamente puede trabajar con los actores? Un hermoso drama civil en el que las personas se quieren de verdad a pesar de estar atravesando quizá la mayor crisis familiar de todas. De hecho, no sé la última vez que he visto la comprensión y el apoyo entre dos personas de forma tan palpable en una película, como aquí entre Hitchen y la casi no actriz Honeywood. Comunicación, diálogos. [Cannes]

Un tema sobre relaciones complicadas, admirablemente difícil para un cineasta de 28 años. Además, las imágenes captan perfectamente la atmósfera del lugar y la época, así como el estado de ánimo de la historia y sus protagonistas. Aunque este tipo de dramas deprimentes con ambientación histórica en la vieja Rusia me resulta muy lejano, tengo que inclinarme ante Balagov como artista. ¿Qué va a rodar como autor experimentado? P.S.: Las actuaciones de ambas actrices son brillantes. Aunque la cuestión es hasta que punto actuaron. Al día siguiente, en la calle, mientras caminaba rápidamente, levanté un momento la vista del móvil y por un segundo me encontré con la mirada cercana de la Miroshnichenko (la actriz del complicadísimo personaje principal). Era exactamente la misma mirada de la película, la reacción a una persona que entraba en su zona de confort. Me dio escalofríos. [Cannes]

Un irritante película al estilo de Woody Allen, con mucho diálogo y situaciones cómicas, sobre un personaje desesperado e inmaduro. Todos los demás personajes son tan profundos como un fregadero vaciado, pero tienen muchas razones para seguir hablando de algo en supuestos «momentos de la vida cotidiana». Además el montaje es rápido, recuerda a instantáneas de mujeres y solo recogen partes de situaciones, sin contexto ni lógica general. Como una comedia para una noche de chicas. Para mí, una tortura. Algunos espectadores abandonaron la sala y otros aplaudieron al final. [Cannes]

Hay que acostumbrarse a la cámara en mano, y tuve que soportar el ambiente de los chicos criminales de Europa del Este, que no se retrata al estilo «cool» de Guy Ritchie, sino de una manera realista y repulsiva. Pero a medida que el protagonista se hunde más y más bajo la presión psicológica, la película se vuelve más y más envolvente e interesantemente contenida. Un pequeño drama decentemente hecho. [Cannes]

Una obra maestra increíble, que se ve con la boca abierta, que no se puede comparar con nada, y de la que es difícil escribir. Una película de festival con un espíritu muy agradable para el público y un subtexto político ingeniosamente escondido pero fuerte. Una alegoría fascinante, incluso podría decirse que «llena de acción», sobre la maldad altiva y la vida sencilla, obligada a recurrir a la violencia. Ya la escena inicial de un viaje en camión por la selva brasileña crea la expectativa de una experiencia única, que Dornelles y Filho cumplen. Una explosión de creatividad cinematográfica. [Cannes]

Ambientada en la Texas rural y pobre, cuenta la historia de unos forasteros que tienen que ser tipos duros para sobrevivir (o eso creen) y, sin embargo, desarrollan entre ellos algo parecido a una amistad. Aunque él sea una vaquero envejecido y maltratado físicamente, y ella una menor sin padre y con la madre en la cárcel. Para ser el debut de un director de largometrajes, se trata de un drama muy bien contado pero también poco original y poco emotivo, que podría haberse situado en otros mil lugares del mundo con la misma historia y no habría perdido nada. [Cannes]

Otro trabajo loco y desestabilizador de Dupieux, esta vez basado sobre todo en el comportamiento oscuro del protagonista y lo que hará en el siguiente paso. Lo mejor de Dupieux es lo mucho que se aleja de la realidad sin perder el contacto con la psicología humana, que también deconstruye con ingeniosa perspicacia. Pero no entendí muy bien la elección del desvanecimiento del color aquí. Tal vez sea una paráfrasis del «home video» del héroe, pero de cualquier manera, me hizo bajar la película. [Cannes]

Jarmusch escribe los personajes a la medida de su icónico reparto, dejándoles hacer el tonto y reaccionar de forma humorísticamente mimética a lo que conocemos de las películas de zombis. Al son de misteriosos riffs de guitarra como los de Dead Man, a un ritmo algo más rápido, con Tom Waits como hombre del bosque, observando el fin del mundo desde la distancia, un papel puramente zombi para Iggy Pop, comiéndose los intestinos recién cortado y ensangrentados de su ama de llaves y tomándose el café de la cafetera de la señora, y sin olvidar el entusiasmo y la perspicacia de los jóvenes frikis del género. Simpática química entre el dúo de policías Murray/Driver, que representan dos generaciones de héroes de las dramedy de Jarmusch. Una agradable diversión con un gore sorprendentemente completo, nada rompedor, pero una visión alternativa de cosas conocidas. Para los fans acérrimos de Jarmusch, que resoplaban por la «comercialidad» de Noche en la Tierra, será otro pausa en la carrera de Jim. Y si Universal obtendrá beneficios en los multicines, no lo sé: es demasiado anticuada y poco dinámica para la juventud palomitera, a pesar del bendito número de cadáveres y de los buenos CGI, y los fans de Jarmusch a esto tampoco van. [Cannes]

La película comienza de forma prometedora. Tiene una interesante visión de ciencia ficción, bellos efectos visuales, y el tema de la unión de un padre y un hijo mientras se hacen conscientes tiene un gran potencial como película. Pero el resultado, a pesar del agradable encanto de la aventura, es narrativamente anodino y emocional y mentalmente falla por completo el objetivo previsto. Es así, cuando sabes lo que se supone que debes experimentar como espectador, pero por su ingenuidad y subdesarrollo se te escapa por completo. Mucho de esto se debe realmente a Jaden Smith, o quizás a su dirección por parte de Shyamalan.

Un intento fallido de terror misterioso, como mejor y sobre todo lo hace Hollywood. Personajes poco atractivos (en cualquier sentido de la palabra), exposición larga y sin interés, un intento fallido del ya cansado truco de crear tensión mientras se deambula por el bosque. Bebjak es un buen director, los personajes y la historia eran mucho más complejos y profundos en The Line, que era genial. Pero este tipo de película de género requiere, obviamente, otro tipo de talento y, probablemente, un guión mejor adaptado, que en este caso parace algo comercial cocinado simple y rápido.