A fuego lento

Una frágil película histórica sobre el amor por la comida y el amor entre Juliette Binoche y Benoît Magimel, a los que une ese amor por la comida. Ambos son magistrales cocineros, saben cómo contar historias perspicaces sobre la comida y se dedican al disfrute gourmet de ella. Una parte significativa del metraje consiste en elegantes tomas en cámara lenta de la preparación de la comida, otra parte significativa de tomas de personas comiendo: de ellos dos o de sus invitados. Casi toda la película tiene lugar en los interiores de la casa, su trama es escasa y la película se mantiene unida por la relación delicadamente representada y sublimemente romántica de la pareja central, llena de respeto mutuo. Si te gusta cocinar, hornear y comer tan elegante como los franceses, añade una o dos estrellas a mi calificación. [Cannes FF] (27.05.2023)

Visto desde fuera, A fuego lento es prácticamente la culminación de un género que podría denominarse simplemente “gastro-porno”. Sin embargo, en esencia, también es una película que toca tantos temas interesantes y reflexivos que todos los sabores que evoca durante la proyección permanecerán con nosotros durante algún tiempo. Un drama rodado con sensibilidad y con interpretaciones magistrales. No me sorprendería que Benoît Magimel ganara el César por tercer año consecutivo. [KVIFF 2023] (13.09.2023)

Una verdadera pornografía gastrónoma. El máximo homenaje a la gastronomía francesa, en el que la mayoría de los personajes son hedonistas y gourmets, grandes chefs, conocedores de la comida, los animales y la naturaleza, y grandes oradores, por lo que también hablan selectivamente de la comida y sus orígenes e historia. Gran parte de la película la ocupan las escenas de preparación de platos seleccionados y su posterior consumo, para lo que el público ya está preparado por la secuencia inicial de media hora, en la que, acompañados apenas de los sonidos ambientales de la cocina y los suspiros, los gourmets bailan entre los platos y se sirven en la mesa. El vínculo entre los platos es una tierna línea romántica, en la que la confesión de amor nunca está completa sin una cena a la luz de las velas, y la mezcla conjunta del caldo de verduras o la salsa borgoña es un preludio de momentos íntimos. Una película en la que el amor pasa claramente por el estómago y en la que incluso la descripción anatómica de la ingesta de alimentos suena a poesía amorosa. (08.07.2023)

“Worse than starving is having food just for daily fuel without knowing properly what you're eating.” Dodin's friends produce a lot of morsels of wisdom while feasting, and this could easily be another. You won't find any pressurized Boiling Point in late 19th century France, and the masterfully shot first 20 minutes are proof of that. The steam evaporating, the sizzle of the fat oozing out, the pots slowly bubbling and inside them dozens of organic ingredients you could only dream of when shopping in a supermarket. To make all that whirring or rustling stand out, the film also lacks any music. On the cooking and gourmet side, it’s pure masturbation. What is surprising, however, is that even the romantic line in the background of this gastro-paradise does not lag behind the cooking. The central couple in the autumn of their lives manage to sell emotions in the kitchen as well as in the bedroom. In short, Anh Hung Tran has sent out into the world the most French film "from the good old France" in years, and one where you really should have your mind made up about where you're going to eat after the credits roll. (04.11.2023)

A wonderful film about cooking from historic France. The story is set in 1870 and the main character, considered the Napoleon of the culinary arts, cooks for his influential friends with Eugenie, who is his cook but also his mistress, but so far refuses to marry. They also have the daughter from a neighbor who has a great talent for discerning flavors. The first hour is a great gastronomic experience, it is a pleasure to know that they really cook with fresh ingredients that they have to grow, pick and possibly hunt themselves. The second half veers into drama and it got a bit ragged for me, but the ending kicks things up again nicely. I also praise the intelligent dialogue and solid acting performances. Taste does rub off with age, requires a good memory. This wine has everything: elegance, nobility and purity. Impressive France. 75%. (15.04.2024)